Alotark está desarrollando el proyecto para la implantación de un sistema de gestión energética en los edificios del Complejo de BBVA en Tres Cantos.
A través de una alianza estratégica con MAETEL Alotark está desarrollando el proyecto para la implantación de un sistema de gestión energética en los edificios del Complejo de BBVA en Tres Cantos.
Se trata de uno de los centros de proceso de datos más avanzados del mundo y un complejo en el que se aloja parte de la infraestructura tecnológica desde la que el Grupo da soporte a sus operaciones en Europa. Un proyecto que tiene por objetivo reducir el consumo energético y las emisiones de CO2 de esta infraestructura, en consonancia con el posicionamiento del banco en el que la tecnología y la sostenibilidad son dos pilares básicos en toda su actividad.
La gestión energética que Alotark está desarrollando junto a MAETEL se basa en el modelo de ahorros compartidos con el cliente
Este modelo está orientado a conseguir la máxima eficiencia energética del activo con coste cero para la propiedad, implantando de inicio MAES operacionales o sin inversión. Los centros de datos necesitan una gran cantidad de energía para su funcionamiento ya que, para garantizar la estabilidad y seguridad de los datos, la redundancia es esencial. La redundancia es la duplicación de componentes críticos como la alimentación, el hardware, las conexiones de red y los sistemas de refrigeración para garantizar que, en caso de fallo, haya un sistema de reserva listo para tomar el relevo sin interrupción, proporcionando alta disponibilidad y fiabilidad.
Al contrario de lo que se podría llegar a pensar, los centros de datos presentan enormes oportunidades de ahorro lo cual demuestra, una vez más, que antes de empezar con la fase de inversión en medidas de ahorro, hay recorrido para ahorrar energía a través la gestión del propio edificio.
Uno de los objetivos fundamentales, conjuntamente con el propio ahorro energético en sí, es la implantación de un sistema de gestión energética conducente a la obtención de la ISO 50001.
No cabe duda de que la gestión de la energía en centros de datos es uno de los desafíos más complejos en el mundo actual y un reto de futuro.